martes, 7 de junio de 2022

Naadp Zeló, la heroína de la mujer feminista


La venganza de una mujer con heridas de amor es una novela que nos retrata a una heroína no desde la clásica y trillada visión de la mujer que es heroína de la mano de un hombre o para quedarse con un hombre como acto heroico.

 Naadp Zeló no es la protagonista que pudiera gustarle a una mujer feminista que quiere que el día domingo se llame dominga, su feminismo no es el de la confrontación ni el de cambiar las reglas, sino el de imponer sus propias reglas. Después de una decepción amorosa, Naadp decide no reconstruirse, sino construirse. Es una mujer que sabe decir “adiós” sin comas ni puntos suspensivos, y quizás allí radica su grandeza como personaje, porque ella no  espera ni un día, ni una hora, ni un minuto y ni siquiera un segundo para que el hombre que amó recapacite, cambie, la revalore y vuelva con a su lado.

Tampoco es la clásica mujer que se pasa la vida -la única que tenemos-, esperando una razón por la cual su pareja la ha abandonado, y culpándose de lo que “pasó”, sino que simplemente asume el hecho y se va, pero, a diferencia de aquellas personas a las que les gana la nostalgia, el deseo del reencuentro o de una segunda oportunidad, ella se va para siempre, y se va, sobre todo, para no volver nunca a ser la misma a la que su novio ha abandonado.

Previsiblemente, esa capacidad que tiene de irse para ser otra, totalmente otra, hasta con otro nombre, es lo que la vuelve inolvidable, imprescindible e invaluable, casi una deidad desconocida,  para el hombre que se fue pensando –sin culpa- que a ella le haría pedazos el corazón.

En adelante a esa nueva mujer la envuelve el misterio, ella, que antes era frágil, manipulable y predecible, ahora no tolera ni admite que nadie se meta ni mucho menos cuestione su vida privada, su vida amorosa y sexual; no permite que se sepa nada de su realidad, dando pie con ello a que se sospeche de todo, sin que por obviedad se confirme nada.

Nos encontramos ante una heroica no de un género, su género, sino de sí misma, una heroína individualista cuyo logro no es colectivo sino que simplemente se nota –porque no se sabe- que es feliz, y es feliz porque no ha sabido llevarse el pasado a cuestas, soportar el peso de ese pasado para que le arruine la vida, la única vida que tiene, como suelen hacerlo tantos pasados con tantas personas que no saben desprenderse de ellos.

En una época es la que puede haber mujeres que de día van a una marcha feminista y de noche le entregan su teléfono al novio para que les revise cada mensaje, Naadp Zeló se vuelve una heroína no de la mujer contra el hombre, sino de la mujer contra sí misma, puesto que, como dicen, el peor enemigo lo llevamos siempre dentro.

domingo, 22 de abril de 2018

Vegeta, el orgullo de los chaparros


Aunque en la serie Dragon Ball Z las estaturas de los personajes nunca son dichas y por ello sólo se pueden hacer especulaciones al respecto, tanto así que Krilin a veces da la apariencia de medir 1.30m y después de rondar los 1.50m, una sola y breve escena ayuda a tomar un punto de referencia para medir a todos los guerreros, y esto ocurrió cuando el Androide 20, en realidad el Dr. Maki, escanea a Yamcha, poco antes de atacarlo. El amigo de la infancia de Goku, y su primer rival que después se haría su compañero de batallas, mide 1.83, es uno de los guerreros terrícolas más altos, tan sólo por debajo Ten Shin Han (si es que a éste se le puede considerar humano). Pero así las cosas, siendo Yamcha un poco más alto que Goku, por las pocas escenas en la que ya siendo adultos se les ha visto juntos, se puede especular que Goku mide 1.75m, quizás unos 10cm más bajo que su padre, pese a ser en todo lo demás idénticos.
En ese orden, cuando Vegeta pelea contra Goku por primera vez, se nota una diferencia de estaturas muy marcada. La altura del sayayin malvado en ese entonces debió de ser, cuando mucho, de 1.55 mts. No obstante, a pesar de ser ya un hombre adulto, parece ser que Vegeta creció con el tiempo (particularidades de la raza sayayin), o a que a sus creadores les debió parecer necesario que fuera de la misma altura de su esposa, Bulma, puesto que ya en la saga de Cell, se le ve un poquitín más alto, y con la llegada de Buu, Vegeta por fin creció hasta ser de la estatura de ella. No obstante, existen infinidad de dibujos en los que incluso es más alto. Es precisamente en esta saga, cuando vegeta vuelve a ser malo y obliga a Goku a pelear, cuando sus estaturas se equilibran más. Vegeta debe de medir en torno al 1.65 (10cm más que cuando llego a la tierra, todo un logro), e incluso en algunas escenas, cuando está junto a “Kakaroto”, da la impresión de que la diferencia de estaturas es todavía más reducida.
Pero digamos que, en términos generales, casi durante toda la serie se puede ver a un Vegeta de 1.65 de estatura, lo que aunado a su musculatura (que también crece), y a que se llega a cortar el cabello, lo hace parecer un tipo imponente, cuya mirada fría y arrogante, le imprime tal personalidad que llega un momento en el que para nada importa que no sea alto.
Vegeta, que surgió tan malvado como Picoro, se fue transformando hasta superar a éste como el mejor antihéroe. Vegeta jamás cedió terreno, y si bien lo superaban, se esmeraba tanto que aumentaba su poder de tal forma que volvía a ser un guerrero temible, contrario a Picoro, que una vez que perdió terreno, tras ser insuficientes sus poderes luego de fusionarse con Kamisama, ya no volvió nunca a ser considerado un guerrero temible.
Muy por el contrario, al ser un antihéroe que pese a volverse bueno nunca cedió en su inmenso orgullo, Vegeta se transformó un icono de la cultura, incluso de su relación con Bulma, de lo que en los primeros años jamás se dieron detalles, se especuló que en ella a puerta cerrada era un tipo romántico, atento y preocupado. Todo un héroe, todo un galán, todo un icono del mal carácter, y un príncipe de una raza invulnerable, nada mal para medir 1.65, algo que, siendo lo que es y lo que fue, ya nadie lo nota.

viernes, 18 de agosto de 2017

Cuba libre, y Carlos Alberto Montaner presidente

Nunca había leído una novela ucrónica. Sabía, sin embargo, que existen muchas y muy buenas, sobre todo ambientadas a partir de la segunda guerra mundial, en un escenario en el que los nazis habrían ganado a los aliados e impuesto al mundo su reinado del terror, ya que eso es precisamente en lo que radica una ucranía, ofrece una historia alternativa a la real surgida a partir de un suceso que pudo evitarse. Sin embargo, realmente no me habían llamado la atención tanto como para enfrascarme en una lectura así. Las asociaba a la ciencia ficción y ésta nunca ha sido de mi total agrado.
Pero nunca se debe de decir nunca en esta vida llena de sorpresas. Hace unas cuantas semanas me invitaron a leer la novela Maximiliano y Carlota: la dinastía de los Habsburgo en México, de Adam J. Oderoll, y como no me pareció una obra relacionada con la ciencia ficción, me decidí a leerla. Se trata de una novela ucrónica en la que el célebre archiduque Maximiliano de Austria, que aceptó la corona de Moctezuma que le ofreció Napoleón III, logra formar un gobierno a partir de la prematura muerte del indomable presidente Benito Juárez (éste es precisamente el suceso que lo cambia todo), y en tal escenario alternativo, México en la actualidad no tiene presidentes, tiene emperadores. Es la última monarquía occidental autentica que queda con vida, y es también una potencia mundial que constantemente se apunta los cañones con los Estados Unidos. Una especie de guerra fría en América entre dos países vecinos.
Hasta aquí alguien preguntará, ¿qué tiene que ver una historia alternativa de México con Cuba? Pues mucho. Ahora lo explico. En uno de los primeros capítulos de la novela, el emperador en turno de México de la década de los sesentas, menciona en una charla con Kennedy que a su imperio llegó un tal Castro con ideas comunistas, y que lo encarceló a purgar una condena de treinta años (Fidel Castro efectivamente estuvo en México con sus guerrilleros y sí fue enviado a prisión, pero sólo por unos meses), ante lo que Kennedy lo felicita por ayudarlo a combatir el comunismo.
Páginas más adelante, leemos que Kennedy no fue asesinado el 22 de noviembre de 1963. ¿Se entiende? Si Fidel no pudo ir a apoderarse de la isla de Cuba por estar en México encerrado en una prisión de máxima seguridad, Kennedy no tenía quien lo mandara matar… Es lo que nos sugiere el autor.
Después, en la época actual, el emperador en turno, muy joven aún pero que se trae con Trump unas ganas enormes de lanzar misiles de un lado a otro de la frontera (en esta historia México reacciona furioso ante el racismo del nuevo presidente de los Estados Unidos, y amenaza y tiene con qué ir a la guerra), reconoce que admira mucho y que es un gran amigo del presidente de Cuba, llamado Carlos Alberto Montaner, por su extraordinario logro de convertir a su pueblo en una de las democracias más ricas y sólidas del mundo, donde existe un profundo respeto a los derechos humanos y a las libertades individuales. Montaner se ofrece a mediar entre el emperador de México y Trump para que ambos quiten el dedo del gatillo.
Y hasta aquí puedo contar. Sólo añado que realmente se me hizo muy interesante y una idea genial de Oderoll ofrecer una historia en la que con sacar de la jugada a Fidel Castro se evita automáticamente el magnicidio de Dallas que tanto conmocionó al mundo. Brillante. 

sábado, 20 de febrero de 2016

Gaspard Caderousse, El Conde de Montecristo

La obra maestra El Conde de Montecristo es una novela  que nos presenta a villanos con distintos matices, algunos actúan por odio y envidia, otros por avaricia, algunos más por venganza y los hay quienes atacan hasta por diversión. Gaspard Caderousse es quizás el más bajo de los villanos puesto que su cobardía opaca por momentos su maldad.
Se trata de un joven sastre marsellés y amigo, en apariencia, de Edmond Dantés. Caderousse es una rata envidiosa que se enfurece aun cuando un pobre infeliz tiene con qué comer. Al volver Dantés de un viaje con una modesta riqueza, el sastre se llena de envidia, incluso se aprecia capaz de todo por destruir la felicidad de Dantés.
Poco después, cuando Mondego y Danglars traman la perdición del joven marinero, Caderousse, junto a ellos y en estado de ebriedad, se muestra acobardado, incluso dice sentir simpatías por Dantés. Ese momento de debilidad se lo relata a un misterioso abate años después y es lo que lo salva de la perdición. Porque el abate no es otro que Dantés, fugado de prisión y con poder suficiente para destruir a cualquier enemigo.
En lugar de castigarlo, Dantés provee a Caderousse de una modesta fortuna con la cual podrá vivir bien el resto de su vida. Pero el antiguo sastre no la quiere compartir con su esposa, se deshace de ella y termina en prisión, por azares del destino junto al hijo ilegitimo Villefort, Benedetto.
Cuando Dantés se hace presente en París para dar la última estocada de su larga venganza, también aparee Caderousse con las peores intenciones, ya más viejo y más malo, quizás alejado de su antaño tenue sentimentalismo. Dantés lo descubre y tal vez creyendo que ya es imposible redimirlo, permite que sea asesinado por su cómplice, Benedetto. Mas poco antes de su muerte le revela quién es en realidad ese oriental cubierto de oro a quien todos llaman Montecristo, pretendiendo probarle con ello que Dios castiga a los malos y gratifica a los buenos.

domingo, 3 de enero de 2016

El cuervo, el mejor personaje gótico del cine

Como personaje gótico es imposible negar que Batman se defiende bien, evoluciona al gusto de esta sociedad postmoderna y resurge de sus recaídas para hacer que lo estimemos como en la infancia en la cual lo conocimos. Pero no por eso me gusta más que Eric Draven.
Vamos por partes, primero que nada, es imposible negar que la fama de la película El cuervo, y del personaje diría yo más que la película en sí, viene debido al desgraciado final que tuvo durante su rodaje  Brandon Lee, un joven que estaba que ni mandado a hacer para el personaje gótico que encarnó: rasgos achinados pero no tanto y aspecto malencarado sin caer en lo malévolo. Lee murió cuando le dispararon con unas balas que pretendían ser salvas y que eran bastante reales antes siquiera de que la película estuviera terminada, una desgracia que para un filme gótico resultó ser la mejor promoción.
La muerte de Lee lo soldó de forma inseparable a su personaje. Brandon Lee es ese cuervo, ese personaje nostálgico y oscuro que tan bien encarna la moda gótica contemporánea. Pero, por otro lado, no por ello se puede negar que la obra brilla con luz propia.
La película nos cuenta la triste pero no por eso menos hermosa historia de Eric Draven y su novia, una joven pareja de  Detroit que es víctima de una pandilla de maleantes, torturada y asesinada una noche siniestra, la noche antes de  Halloween.
Un año después, Eric sale de su tumba guiado por un tétrico cuervo que se vuelve su compañero inseparable. El joven recucitado toma un atuendo acorde a su amigo oscuro. Se transforma en cuervo que por las noches busca uno a uno a aquellos que terminaron con su felicidad y su vida al mismo tiempo.
Pero aunque es un vengador, es bueno; Eric se convierte en un especie de antihéroe que castiga a los malos a la vez que trata de ayudar a quienes estimaba en vida. La historia quizás pueda ser la de una venganza similar a muchas otras, pero el contexto es que lo que ha vuelto a la película un clásico imprescindible.
Ese hombre vestido de negro con la cara blanca, deambulando por las noches mientras un cuervo vuela sobre su cabeza como una especie de guardaespaldas, se ha convertido, por méritos propios, en el mejor personaje gótico del cine, por mucho que eso pueda pesarle a Batman.

martes, 24 de noviembre de 2015

Fly, el de las aventuras

Cuando yo era niño me hice, en unos cuantos días, un gran fanático de una serie animada conocida como Las aventuras de Fly. Eso ocurrió porque la historia tenía una capacidad de síntesis impresionante: bastó un capítulo para que se supiera que Fly era un niño especial, valiente y gran espadachín, el típico héroe que cuando somos niños nos gusta ver.
Unos cuantos capítulos más consolidaron mi fanatismo por la serie. Apareció un personaje un tanto cómico, Abán, quien, pese a su comicidad, era el héroe legendario que veinte años atrás había vencido al monstruo Hadler. Pero en la actualidad, hablando de la serie, Hadler revive, va a la isla donde Fly acaba de iniciarse como discípulo de Abán y lo ataca de forma brutal y sin miramientos.
El sacrificio de Abán, sin titubear un momento sobre su deber como héroe y ser humano, me conmovió hasta los huesos. Tenía yo apenas unos años y jamás había visto o leído un acto tan heroico.
Pero, pasando a Fly, se trata de un niño de diez años que parece un ser humano. De hecho, en parte lo es, aunque vive en una isla llena de monstruos, que no son otros que los antiguos súbditos de Hadler que tras la muerte de éste no les quedó más remedio que volverse buenos. Entre ellos está Blas, un hechicero que encontró a Fly flotando en una balsa cuando era un bebé y lo cuidó en adelante como su nieto.
Fly sueña con ser un valiente, es decir, un espadachín que lucha por la justicia, aunque su abuelo quiere que sea mago. El niño tiene habilidades derivadas de que valor no le falta. Pero hay algo más, cuando se enfurece, una luz aparece en su frente en la forma esquemática del rostro de un dragón. Entonces se vuelve demasiado fuerte, literalmente invencible. La segunda vez que revela ese gran poder es precisamente cuando su maestro Abán es asesinado por Hadler.
Pero Hadler en esta resurrección ya no es el jefe absoluto del ejército del mal, sino un súbdito de Burn, un monstruo mucho más poderoso que él que sueña con exterminar a la especie humana. Hadler es el jefe de sus seis generales, líderes de monstruos de diversas naturalezas que se dedican a conquistar reino tras reino.
Cuando Fly casi mata a Hadler tras enfurecerse por la muerte de Abán, el monstruo hechicero le echa encima a sus generales. Primero acude a su encuentro Crocodine, un cocodrilo parado terriblemente fuerte al que Fly vence cuando le aparece una vez más su marca en forma de dragón. El siguiente es Hyunkel, quizás uno de los mejores personajes de la historia.
Hyunkel es un ser humano que, al igual que Fly, fue adoptado por un monstruo súbdito de Hadler. Cree erróneamente que Abán mató a su padre porque éste era el guardián de la puerta que conducía a la cámara del monstruo, y decide que si Abán pasó por allí fue después de matarlo. Por esa razón, Hyunkel, un gran espadachín revestido con una impresionante armadura, odia a la raza humana y es uno de los generales del ejército del mal. Fly sufre mucho para vencerlo debido a que con él no le aparece en la frente la marca que lo vuelve invencible. Esto se debe a que no puede odiar a Hyunkel porque las circunstancias de su crianza fueron muy similares.
Tras caer Hyunkel acude al encuentro de Flay el malvado Freizard, un monstruo que en la mitad de su cuerpo tiene llamas y en la otra hielo. Es además de fuerte demasiado tramposo durante las batallas, por lo que pone en serios aprietos a Fly y sus amigos (a la sazón sus antiguos enemigos, Crocodine y Hyunkel), pero después de una muy dura batalla, Fly lo vence sin recurrir a su famosa marca en la frente.
El siguiente general en ir tras Fly es muy especial. Es Barán, el general que comanda a los dragones del ejército del mal. Por una extrañ razón, Hadler no quería que tal enfrentamiento ocurriera. Barán es un personaje que parece un ser humano, alto, con mirada intimidadora, que lleva en la espalda una espada con  una enorme empuñadura en forma de cabeza de dragón. Pero la relación de Barán con los dragones no termina allí, tiene, como Fly, en la frente la marca del dragón.
Se trata del caballero del Dragón, un semi dios enviado para castigar a los humanos y que resulta ser el padre de Fly. Al consumarse el primer enfrentamiento entre padre e hijo, la serie termina abruptamente. Años después me enteré de que eso se debió a la falta de presupuesto, pero que evidentemente existía un manga con la historia de principio a fin en el que pasaban muchas cosas interesantes.
No estoy seguro si después se concluyó el anime; al parecer sí pero no fue nunca doblado al español. Si existe quizás algún día vea la historia completa. O a lo mejor ya ni siquiera me entretendría, aunque en mi más lejana infancia la disfruté enormemente.

lunes, 21 de septiembre de 2015

Jack Dawson, de Titanic

Titanic fue una de las mejores películas de la década antepasada. La legión de premios Oscar que consiguió no dejan lugar a dudas. Fue uno de esos filmes en los que todo encajó para que el resultado fuera impecable: una historia romántica bien labrada, buenas actuaciones y una escenografía que no salió a deber nada. Todo coronado con un final dramático, heroico y triste.
La actuación de  Leonardo DiCaprio en el papel protagónico de Jack Dawson fue bastante buena. Aunque a mí siempre me ha parecido demasiado personaje con un actor que le quedó un poco chico. Y no se trata de las malas capacidades histriónicas de  DiCaprio, sino que su aspecto físico no encajaba nada en la piel de Dawson.
Jack Dawson es un joven norteamericano, originario de  Chippewa Falls, Wisconsin, quien pese a ser pobre no se priva del gusto de viajar por el mundo. Se trata de un prometedor artista que lleva siempre consigo un cuaderno lleno de sus dibujos, al que nada le parece imposible, capaz de traspasar con dos frases las barreras sociales que todavía tan infranqueables estaban en el período justo antes de la pre guerra.
En un afortunado un contra tiempo juego de póquer, Dawson y su amigo Fabrizzio ganan unos pasajes de tercera clase para que el barco más “seguro del mundo”, el Titanic, los lleve de Europa a Nueva York. Ya en el barco, Dawson ve a lo lejos a la aristocrática, elegante y hermosa Rose DeWitt Bukater, y poco después la sorprende en una muy distinta apariencia, tratando de suicidarse arrojándose del barco.
Unas cuantas palabras bastan para que Dawson la convenza de lo desacertado que fue el método de suicidio que ella escogió, pero segundos después tiene que salvarla realmente porque ella resbala y a punto está de caer al mar. Rose logra que Dawson finja y oculte lo de su intento de suicidio. Como premio por haberla salvado, es invitado a una cena en el comedor de la primera clase.
En la cena, el novio de Rose, Caledon Hockley, intenta ridiculizar a Dawson por su condición humilde, pero se encuentra con un hombre desenvuelto, seguro de sí mismo y capaz de articular frases que agradan y hacen reír a las distinguidísimas celebridades que se dan cita en la cena.
De allí en adelante se empieza a crear un vínculo irrompible entre Rose y Jack Dawson. Pronto se enamoran, y ella después de algunas dudas adquiere la seguridad de que desea irse con Jack en cuanto el barco llegue a América. Pero la cosa no les espera tan sencilla. Rose pide a Jack que la dibuje usando una costosa, antigua y pesada joya, llamada “El corazón del mar”, regalo de compromiso de Hockley. El incidente se presta para que Hockley y su guardaespaldas culpen a Jack de querer robarla y lo mandan encerrar en un rincón del barco.
Pero para entonces ya ha iniciado poco a poco la debacle. El Titanic ha chocado contra un  iceberg y en cuestión de horas se irá al fondo del mar. Rose se arma de valor y va a rescatar a Jack tan solo para que en adelante él la salve a ella todas las veces necesarias. Durante el hundimiento, mientras todo es pánico y gritos, Jack se mantiene sereno, seguro tal vez de que él va a morir pero de que logrará salvarla a ella.
Gracias a los esfuerzos de  Jack Dawson, Rose salva la vida, pero él muere congelado y su tumba es el fondo del mar, epilogo triste que sin embargo lo dejó grabado para siempre en la mente de una generación de cinéfilos.